Terracota natural, que presenta la textura rugosa habitual de la cerámica tipo Klinker.
Es un producto clásico cocido a una temperatura de 1320 grados, lo que le confiere unas propiedades mecánicas elevadas.
Se encuentra disponible en dos formatos 30×60 y 40×60 cm, que resultan ideales para rehabilitaciones con un sistema de perfilería horizontal.