La rehabilitación con fachadas ventiladas revaloriza las viviendas notablemente
La rehabilitación de edificios residenciales suelen toparse con la reticencia inicial de algunos vecinos. El coste que supone es, en muchos casos, un obstáculo para que las comunidades de vecinos se pongan de acuerdo en realizar una actuación integral sobre la envolvente del edificio. Sin embargo, las ventajas de acometer estas acciones son muchas ya que, no solo se aumenta la estética del bloque, sino que se gana en eficiencia energética y confort para los habitantes de las viviendas. Si se llevan además a cabo otras actuaciones, también se consigue mayor accesibilidad, seguridad y en definitiva, un espacio mucho más habitable. Todo ello suma para conseguir que los pisos que forman parte de un edificio rehabilitado se revaloricen de forma significativa, en una horquilla que ronda del 20 al 60%, en función de las actuaciones llevadas, del estado de cada vivienda, situación, entorno, etc.
Contar con un piso en un edificio rehabilitado con fachada ventilada solo tiene ventajas. Si sus propietarios no tienen en mente vender o alquilar su vivienda en un futuro, lograrán mayor eficiencia energética y un confort del que no podían disfrutar con las condiciones originales del bloque, especialmente si éste acumula varias décadas desde su construcción. Si quieren vender o alquilar su piso, las rehabilitaciones de la envolvente también les permitirán aumentar el valor de su vivienda tanto si es para venta como para alquiler. El atractivo de un piso rehabilitado en su interior es lógico pero también lo es que cuente con un revestimiento exterior de la fachada adecuado y moderno que le dote del aislamiento térmico necesario, elimine humedades y condensaciones y le proteja de las inclemencias meteorológicas y las variaciones térmicas durante todo el año.
¿Por qué las viviendas «valen más»?
La instalación de fachadas ventiladas permite realizar una actuación completa sobre la envolvente superando un mero cambio estético que no deja de ser en muchos casos un «lavado de cara» que no aporta las soluciones deseadas de eficiencia, ahorro y comodidad. Por ello, todas las actuaciones realizadas bajo un proyecto arquitectónico adecuado y con una ejecución perfecta permiten que la vivienda se revalorice ya que:
- Mejora del confort. Una vivienda «cómoda para vivir» es mucho más fácil para vender o alquilar
- Desaparecen las sensaciones de frío debidas a la baja temperatura superficial de paredes y ventanas.
- Se corrige la problemática de las bajas temperaturas en viviendas o habitaciones orientadas al norte.
- Mejora del confort térmico en los meses calurosos de verano.
- Desaparecen las habituales manchas y goteras por condensaciones.
- Disminuye la contaminación acústica.
- Mejoras funcionales. Una vivienda «que no tiene problemas de mantenimiento»
- La habitabilidad del edificio se ve mejorada al renovar instalaciones obsoletas, corregir goteras y eliminar condensaciones.
- Mejora de la estética del edificio. Un aspecto atractivo del edificio es un «gancho perfecto» para el posible inquilino o comprador
- Los sistemas constructivos actuales permiten una renovación completa de la imagen del edificio consiguiendo que los edificios tengan un aspecto prácticamente como aquellos que son de reciente construcción.
- La oferta de materiales y terminaciones, y la posibilidad de combinarlos entre sí, abre un amplio abanico de posibilidades estéticas adecuadas a cada comunidad.
- Ahorros derivados de la reducción drástica del consumo energético. Los consumos periódicos son valorados enormemente por el cliente que quiere comprar y alquilar.
- La mayor parte de la energía consumida en una vivienda está destinada a mantener una temperatura confortable en el interior de la vivienda. Una rehabilitación eficiente puede reducir el gasto energético entre un 29 y un 40%, según los datos del IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía).
- Los precios energéticos suelen sufrir importantes vaivenes que afectan de manera notable a las facturas por lo que contar con una vivienda eficiente energéticamente cada vez cobra mayor valor.
- Mejoras medioambientales y sostenibles. Cada vez cobra más peso los criterios sostenibles para la compra o el alquiler de una vivienda.
- Con una rehabilitación eficiente se reduce entre un 29 y un 40% el consumo energético con la consiguiente disminución de aporte de gases contaminantes.
La rehabilitación mejora la calificación energética; el criterio objetivo para la revalorización
La calificación energética de las viviendas, establecida en el RD 4
7/2007 se verá mejorada con la rehabilitación, incidiendo de forma muy importante -por su objetividad- en la revalorización de la vivienda. Dicha calificación energética es un criterio objetivo que muestra el nivel de eficiencia de una vivienda mediante una escala del desde la «A», para aquellas más eficientes hasta la «G», para las que cuentan con una menor capacidad de eficiencia energética. Con la rehabilitación de la envolvente se mejora la calificación energética y éste es un excelente argumento de venta (o alquiler) objetivo y contrastado de forma oficial. De hecho este Certificado Energético es obligatorio en España desde junio de 2013 tanto para poder alquilar o vender cualquier vivienda y es responsabilidad del propietario obtenerlo a través de un técnico homologado.
La calificación energética de cada piso se expresa a través de indicadores que explican el comportamiento energético. Estos indicadores se refieren a la unidad de superficie útil del inmueble y se calculan a partir de la energía consumida por el edificio para satisfacer, en unas condiciones climáticas determinadas, las necesidades asociadas a unas condiciones normales de funcionamiento y ocupación. Expresan la energía consumida en diversas áreas como calefacción, refrigeración, ventilación, producción de ACS o iluminación. Estos comportamientos marcan las condiciones de confort térmico, acústico, lumínico u otros como la calidad del aire interior.
Subvenciones públicas la rehabilitación; la mejor herramienta para reducir el coste económico por vecino
El cambio de modelo energético que están impulsando los gobiernos hace que sean muchas las administraciones públicas están promoviendo planes de ayuda específicos para la rehabilitación térmica de los edificios que mejoren su eficiencia energética. El coste se reduce de forma ostensible con las subvenciones que el Estado y las administraciones autonómicas y municipales están impulsando. Esto supone que la inversión a realizar se reduzca y sea más fácil poder acometer por parte de la comunidad una rehabilitación con fachada ventilada superando las reticencias tradicionales de algunos vecinos por el desembolso económico.
En definiva, rehabilitar un edificio con fachada ventilada es una opción llena de ventajas para revalorizar una vivienda y conseguir una tasación más elevada ante una venta o alquiler.